domingo, 15 de julio de 2007

Sonic Youth



Diamond Sea Lyrics

Time takes its crazy toll
and how does your mirror grow
you better watch yourself when you jump into it
'cause the mirror's gonna steal your soul

I wonder how it came to be my friend
that someone just like you has come again
you'll never, never know how close you came
until you fall in love with the diamond rain

throw all his trash away
look out he's here to stay
your mirror's gonna crack when he breaks into it
and you'll never never be the same

look into his eyes and you can see
why all the little kids are dressed in dreams
I wonder how he's gonna make it back
when he sees that you just know it's make-belief

blood crystalized as sand
and now I hope you'll understand
you reflected into his looking glass soul
and now the mirror is your only friend

look into his eyes and you will see
that men are not alone on the diamond sea
sail into the heart of the lonely storm
and tell her that you'll love her eternally

time takes its crazy toll
mirror fallin' off the wall
you better look out for the looking glass girl
'cause she's gonna take you for a fall

look into his eyes and you shall see
why everything is quiet and nothing's free
I wonder how he's gonna make her smile
when love is running wild on the diamond sea


(L)
Espejos, espejos... the mirror grows but smaller and smaller..

miércoles, 11 de julio de 2007

Entre sueños y realidades.

Cuando no puedo dormir, me pongo a pensar y pensar...

Cómo saber cuando estas despierto y cuando estas dormido. Cómo saber que lo que estas viviendo es parte de la realidad. Y cómo saber qué es la realidad. Cómo estar seguro de que un sueño no es la realidad. Cómo saber hasta que punto somos racionales y hasta que punto irracionales. Cómo distinguir. Cómo separar la vigilia del seño, la locura de la cordura. Cómo estar seguros de que este sueño no es la realidad. Cómo poder afirmar que realidad hay una sola y sueños muchos. Cómo saber qué es la realidad, cuando en realidad, es de estas que hay muchas. Y cómo saber cuales de estas no son sueños.
Son dos mundos que se fusionan, que dialogan, y que muchas veces la final línea que los divide se vuelve tan difusa y se pierde.
Esta realidad, ¿no es un sueño? O este sueño, ¿no es una realidad? Cómo saber. O mejor aún, ¿queremos saber? Porqué no disfrutar de esta realidad soñada y de este sueño tan real.
Perdámonos en esta fina separación entre los dos mundos. Perdamos nuestras conciencias, nuestra racionalidad, y soñemos cuando estemos despiertos. Vivamos en los sueños. O en la realidad. Vivamos en ambos. La realidad es igual que soñar, que soñar cuando estas dormido.

Entonces, te invito a mis sueños. Te invito a mi realidad. Te invito a mi locura y a mi cordura. Te invito a mi racionalidad y a mi irracionalidad. Te invito a perderte conmigo. A dejar de pensar y a vivir y a soñar. A unir estos dos mundos que parecen tan opuestos pero no lo son. Te invito a olvidar sus diferencias. Soñemos, soñemos todo y hagamos que eso se vuelva la realidad. Vivamos, vivamos todo y hagamos que perdure por siempre en los sueños. Perdámonos, más allá de la realidad; perdámonos en los sueños, pero también más allá de ellos. Seamos sueños y realidad a la vez. Pero seamos. Dejémonos ser, y soñemos y perdámonos juntos. Dulcemente, como en los sueños. Efímeros cómo el humo, eternos como al realidad.




La realidad es pura superchería, puro sueño.

(y cuando te das cuenta que es tu
amigo quien
te da la mano
Entonces para vos ya no existe el miedo, ni
el dolor ni el frío
Estás cómodo con él en tu casa y
sólo ves las
estrellas de espuma
y no hacés más nada porque creés
que ahora
ya no estás más solo
Si te dieras al menos un porqué
Superstición
Superstición
Superstición

Spinetta tiene mucha razon)


lunes, 9 de julio de 2007

Espejos, espejos, mas espejos. Pero diferentes

Mira como baila la bailarina. Se expresa a travez de todo su cuerpo. Y es feliz, la bailarina.
La música la acompaña en su danza. Le da vida a cada uno de sus movimientos. De su sonrisa parece que emana la música. Una sonrisa tan pura y amplia que parece tener su propia vida. Y sus pies inquietos no dejan de brincar, de ponerse de puntillas, de deslizarse por el piso de madera.
Se divierte bailando sola. Pero no se siente sola. Esta acompañada por su misma imagen que el espejo le devuelve. Y parece que son dos bailarinas, felices, danzando en la melodía de la música. Se mueven sin pudor y con decisión y sin embargo, emiten un aura de fragilidad, como el de toda bailarina.
Parecen estar dentro de una cajita musical y la felicidad que las embarga es como la de una niña al abrir su cajita de alajas y ver danzar a la baiarina de cristal.